¿Por qué me pongo pálido cuando me asusto?
Vamos andando tranquilamente por la calle, y de repente un desconocido
nos agarra por detrás. Inmediatamente nuestro rostro toma un color pálido, te
das la vuelta y todo vuelve a la normalidad, aunque el susto no hay quién te lo
quite.
¿Por qué nos ponemos pálidos?
Debido al miedo se produce una reacción fisiológica en el
organismo, nuestro sistema motor se activa aumentando la presión sanguínea, el
ritmo cardíaco e hiperventilando provocado por la secreción de la famosa
adrenalina, una hormona que libera nuestro organismo en situaciones de alto
estrés.
El cerebro interpreta la señal de peligro, se activa el
lóbulo central y mediante la glándula suprarrenal desencadenamos la secreción
de la ya mencionada adrenalina, que se encargará de contraer los vasos
sanguíneos y que ante la situación de alerta manda un mayor caudal de sangre a
las piernas, para proporcionar una huida.
El cuerpo interpreta que en ese momento, hay partes con
prioridad como las piernas, y otras con menos prioridad para la supervivencia
como mantener el flujo de sangre en la cara. La menor cantidad de sangre que
circula por nuestro rostro, es lo que marca el color pálido.
Comentarios
Publicar un comentario